Sólo Hablamos De Historietas

¡Murcia, qué hermosa eres! En la niñez se me antojaba poco menos que el paraíso terrenal, con su manga del Mar Menor, sus palmerales, sus huertas, sus tomates y pimientos y esa gente con un habla tan peculiar. Ahora, ya de adulto, veo que casi han matado la vida que había en el Mar Menor, que cualquier día se convierte en la Peazo Charca, que las hortalizas vienen todas de Marruecos, que la especulación ha arrasado con todo y que hablan una jerga incomprensible. Vamos, que son los belgas españoles. A pesar de todo, hay murcianos que nos caen muy bien y encima tienen doctorados y esas cosas. Mundo Murciano.