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El cine de Woddy Allen me retrotrae directamente a las noches de cine en la segunda tele de mi casa y a mi hermana Mayte, ella con diferencia era la que tenia las inquietudes más elevadas en casa, la que tenia los pies más en la tierra y buscaba la realidad en lugar de la fantasía. Y con ella descubrí a Woody, aunque tengo que reconocer que más allá de los gags más accesibles de sus comedias, el resto me suponían un reto demasiado complejo pese a mi obligada madurez desde muy pequeño. Annie Hall, ese esa cinta que vas comprendiendo según avanza la vida, esta te golpea repetidamente en aspectos sentimentales y llega un momento en el que decides mirar a atrás y valorar lo que perdiste, ya sea por que no supiste conservarlo o simplemente por que aquel pasado no era para ti. Yo en este preciso instante de la vida curiosamente me siento muy Alvy Singer, estoy muy cerca de los 40, la muerte es un tema en el que pienso y si, yo tuve mi Annie Hall, esa mujer que me cambió la vida y que perdí hace unos años. Como yo,